Joe Biden exige a ByteDance vender acciones de TikTok o prohibirá la app en EE.UU.
Ya lo intentó Trump en 2020.
Desde hace un tiempo que les venimos informando sobre las diferentes entidades gubernamentales de Estados Unidos que han prohibido la utilización de TikTok en sus dispositivos móviles, esto por la amenaza a la seguridad nacional que dice haber tras la famosa aplicación de videos.
Pues bien, eso está a punto de pasar al siguiente nivel esto tras el proyecto de ley que facultaría al presidente Joe Biden para bloquear o prohibir cualquier app que ponga en riesgo los intereses nacionales de Estados Unidos, a niveles de seguridad, algo que les contamos en esta otra nota.
La situación escaló y Biden decidió seguir el mismo camino que el ex presidente Donald Trump recorrió en 2020 y próximamente anunciará de manera pública un ultimátum a ByteDance, la dueña de TikTok, para que venda definitivamente las acciones a empresas estadounidendes y de esta manera tener más control sobre los datos que la app guarda de los usuarios.
Según The Wall Street Journal, las dudas sobre la seguridad de la aplicación en la Casa Blanca no han cesado e incluso en el último tiempo han aumentado al punto de convencerse definitivamente que TikTok recopila los datos de sus usuarios y puede traspasarlos al gobierno de China, consabido rival político de los estadounidenses.
Por lo pronto, el CEO de la compañía, Shou ZI Chew, ha sido citado la próxima semana al congreso de Estados Unidos para presentar su parte de la información y responder las preguntas que obviamente apuntarán a la supuesta ligazón con el gobierno chino, así como también saber el paradero de los datos de los usuarios que solo en el país norteamericano sobrepasan los cien millones.
En tanto, desde ByteDance tomaron la postura de “tirar la pelota” al gobierno encabezado por Biden asegurando que, si insisten en el supuesto traspaso de datos, es ese país el que debería tener un sistema de resguardo propio para sus ciudadanos, ya que el supuesto traspaso de acciones exigido no supone una “restricción en el acceso o flujo de datos”.